A unos pocos kilómetros de Esquel se puede visitar un espectacular lago, de aguas cristalinas e inmerso en el bosque patagónico andino.
Se trata del lago Krugger bañado por sedimentos glaciarios que le dan una coloración particular a sus aguas y le imprimen una singular belleza que a nadie deja indiferente.
Para llegar hasta las aguas del Krugger se sale desde Puerto Limonao y se navega el lago Futalaufquen por el Estrecho Monstruos para desembarcar en un pequeño muelle. Una vez allí, las opciones son múltiples y el turista podrá disfrutar desde una noche en el camping agreste, hospedarse en la hostería o elegir la caminata por la senda que bordea el río Frey.
El lago y sus alrededores son admirados por los amantes de la pesca con mosca y del trekking, quienes podrán realizar un recorrido de baja dificultad.
Al estar el lago conectado al río Frey, se puede bordear en una caminata de una hora el río y al final del recorrido se encuentran las Palanganas del Río Frey. Allí se pueden observar una variedad de ejemplares de fauna y flora de la zona, incluído el pato del torrente, un ave muy difícil de encontrar en estas latitudes.