El paisaje alcanza todo su esplendor en invierno: este yacimiento de cloruro de sodio forma un inmenso desierto blanco que en épocas frías alcanza dimensiones de 5 x15 km. Médanos y senderos de sal invitan a un recorrido sorprendente. Además, una planta de procesamiento exhibe el proceso de producción de sal comestible. A 42 km al sudoeste de la ciudad de San Luis.