Desde Puerto Pirámides parten la mayoría de las embarcaciones que llegan hasta unos pocos metros de estas ballenas. La excursión de avistaje de ballenas es de una hora y puede ser uno de los momentos más incomparables que existen. Es ideal hacer esta visita entre septiembre y diciembre. En esa época el número de ballenas es grande y las posibilidades de avistaje rápido es mayor. Pero aún a fines de diciembre es posible tener la suerte de encontrar algún especimen rezagado. En ese tiempo está regulado para evitar molestar a los animales y maximizar el número de personas que pueden hacer la travesía cada día. Esos minutos en el medio del golfo, serán inolvidables.

